A menudo se nos escapan los tecnicismos que pertenecen a sectores en los que no estamos habituados a operar.
En construcción muchos de estos tecnicismos nos despistan y nos sentimos vulnerables por el desconocimiento.
Hoy vamos a explicar qué es un pliego de obra, para qué sirve y qué información recoge.
Pliego, qué es?
Un pliego de obra es un documento que recoge toda la información que nuestro arquitecto técnico recopila de un proyecto antes de llevar a cabo la búsqueda de presupuestos.
En él queda determinado todo lo que que queremos realizar, es por así decirlo "nuestro proyecto pasado al papel".
Pongamos un ejemplo: Si queremos reformar uno de los pisos de nuestra vivienda, nuestro técnico primero escuchará nuestras peticiones: qué nos gusta, qué queremos modificar... Nos orientará y ofrecerá un proyecto de mejora donde estudia las siguientes variables: dónde están las tomas eléctricas, la fontanería si va a ser o no modificada, la estructura (quitar paredes, poner columnas...), elementos en el mobiliario, pinturas, materiales requeridos y sobre todo lo que miden los espacios a su largo, ancho y área.
De esta forma primero "se construye" de forma técnica cada cambio a realizar para que, una vez lleguemos a la empresa constructora, sepa qué trabajos tendrá que hacer, la cantidad de materiales y cuáles tiene que presupuestar y así ofrecer un presupuesto totalmente adaptado a nuestro proyecto en curso.
Por qué es importante?
La información recogida en el pliego no es otra que el desarrollo del proyecto en su totalidad. Cuanto más definido esté, mejor podremos orientarnos en los precios.
La empresa constructora podrá ser más precisa a la hora de ofertar y estimar por ejemplo los plazos de ejecución y entrega de la obra, es decir, cuánto tiempo tardará en realizar los trabajos definidos en el pliego y podremos estrenar nuestra reforma u obra nueva.
Su importancia también reside en que si este pliego es elaborado por un técnico único, todos los presupuestos que recibamos serán bajo un mismo documento de pliego.
Es habitual que si por nuestra cuenta solicitamos precios, las empresas envíen personal de su empresa a realizar estas mediciones y haya diferencias o discrepancias entre unas y otras.
Disponer de un técnico neutral, de nuestro técnico, no solo nos dará tranquilidad y uniformidad en el proyecto, sino que tendremos a una persona especialista dedicada a nosotros que nos explique y ayude en todo momento a entender los procesos de obra así como a mejorar las ofertas recibidas.
El pliego por tanto podríamos considerarlo la base de una construcción o reforma, y como toda buena base debe ser sólida y bien fundamentada, por lo que consideramos el pliego de condiciones uno de los elementos fundamentales en un proceso de obra.
Su buena elaboración puede determinar los resultados finales y los precios que las empresas nos propongan.
Un buen técnico por tanto, es la clave a la hora de profesionalizar un proyecto de obra.
Feliz día para todos!