A la hora de adquirir una vivienda puede asaltarnos la duda: obra nueva o comprar para reformar?
Hoy queremos compartir con vosotros las razones positivas por las que la adquisición de una vivienda de segunda mano puede ser una opción más que aconsejable.
Empezamos!
Precio de adquisición.
Al tratarse de una vivienda de segundo uso, su valor en el mercado será más bajo que una vivienda a estrenar.
Por otra parte dependiendo del estado de la misma, este precio puede variar mucho, también por la ubicación en la que se encuentre.
Lo ideal es que un perito nos indique cuál sería su valor de mercado, así como conocer bien aquellos aspectos de la misma que tendremos que reformar para saber si nos compensa la compra.
Moldeable a nuestro gusto.
La gran ventaja a la hora de comprar vivienda para reformar es la maravillosa posibilidad de llevar un proyecto a nuestro gusto.
Es decir, adquirimos una base, la estructura de una vivienda pero dentro podemos modificarla por completo y dejarla totalmente como nueva!
Esta oportunidad es fabulosa para poder pensar en nuestras necesidades y comodidades a la hora de habitar una vivienda.
Con ayuda de un técnico, podemos explicarle nuestras ideas para que él las adapte al plano de la vivienda y nos indique materiales, calidades, precios y nos oriente para obtener el mejor de los resultados.
Una inversión que compensa.
Finalmente, si tras la reforma un perito valora nuestra vivienda, con total seguridad que ésta tendrá un precio superior al del precio de adquisición más la reforma.
Por ello que en caso de querer venderla o alquilarla lograremos un buen precio por ella o aumentar la cuota de alquiler.
Además, en muchas ocasiones, la opción de comprar para reformar resulta más asequible que la de adquirir una vivienda nueva de promoción.
Como siempre, ante cualquier decisión lo ideal es valorar por separado todas las opciones y estudiar cuál es la que más nos interesa, la más ventajosa y mejor para lo que estamos buscando!
Que tengáis muy buen día!