28/10/2019
Ahorrar calefacción: 10 consejos a aplicar.

Se encienden las calderas en la mayoría de casas y comunidades de vecinos!

Por ello, hacemos un repaso sobre las buenas prácticas que nos conducirán a un ahorro en el consumo final de esta fuente de calor, tan necesaria en los meses que están por venir. 

Toma nota!

 

 

1.Ajusta el termostato

Ni 23° ni 25° ni 27° C. La temperatura de confort se sitúa entre los 19 y los 21° C.  El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) asegura, además, que por la noche, ya acostados bajo el edredón o las mantas, basta con estar a unos 15° C para no pasar frío.

2. Invertir en aislamiento, el mejor ahorro 

Hasta el 30% del gasto se pierde por los muros y techos mal aislados, y por las rendijas de tus puertas y ventanas. Los aislantes y las ventanas de doble cristal evitan las fugas de calor y optimizan el rendimiento de tus sistemas de calefacción. Cada euro invertido en aislamiento se traduce en siete euros de ahorro.


3. El pellet. El combustible económico y 100% renovable

Los pellets son restos de talas y serrín de la industria maderera. Este combustible, 100% limpio y biodegradable, genera más calor por menos dinero en comparación con otras fuentes de energía como la electricidad, el gas butano o el gasoil.

4. Consume solo la energía que necesites

Antes de adquirir una estufa o calefactor piensa en los metros que quieres caldear y elige una potencia adecuada al tamaño de la estancia. Para un calefactor o chimenea eléctrica, por ejemplo, hacen falta más o menos unos 80 W por cada m2.

Si tienes radiadores coloca válvulas termostáticas para regular la temperatura de cada radiador de forma independiente. Podrás bajar o apagar los aparatos en las habitaciones que no uses.

5. ¿Caldera nueva? Apuesta por las de condensación

Las calderas de condensación recuperan gran parte del calor que se produce en la combustión, por eso te ofrecen un ahorro en la factura de en torno al 20%. Además del ahorro y el rendimiento emiten menos gases contaminantes a la atmósfera.

6.  El mito de la temperatura constante

“Las necesidades de calefacción de una vivienda no son constantes ni a lo largo del año, ni a lo largo del día”, señala el IDAE. Esta afirmación contradice la creencia de que mantener la calefacción a una temperatura constante consume menos que apagarla. El IDAE recomienda apagar la calefacción durante la noche y bajar el termostato a 15°C –posición de economía- si vamos a estar fuera de casa unas horas.

7. Mantenimiento y revisiones periódicas

El mantenimiento y las revisiones garantizan el correcto funcionamiento de los sistemas de calefacción. Antes de la llegada del frío es necesario:

  • Purgar los radiadores 
  • Deshollinar el tubo de la chimenea
  • Revisar los parámetros de la estufa de pellets cada dos años.
  • Revisar la caldera por parte de un técnico autorizado una vez al año.

 

8. Soluciones low-cost para optimizar los equipos y evitar fugas de calor

Burletes, espumas, paneles reflectantes… son algunas de soluciones baratas y fáciles de aplicar para minimizar las pérdidas de calor si cuentas con un presupuesto ajustados o vives de alquiler. Ahorra hasta un 30% de energía con burletes, bajopuertas, espuma de poliuretano para sellar las puertas y ventanas o forros térmicos de cortina. Los paneles reflectantes que se colocan en la parte trasera de los radiadores para redirigir el aire caliente hacia el interior de la vivienda reducen el gasto hasta un 20%.

9. Etiquetas y certificados energéticos

Si estás pensando en instalar una bomba de calor como sistema para caldear tu casa fíjate en la etiqueta energética y elige un aparato de bajo consumo (A+ o superior). En caso de que vayas a alquilar una vivienda atiende a la calificación energética del inmueble. Este certificado mide el aislamiento y los sistemas de climatización y agua caliente sanitaria, entre otros, para determinar la eficiencia de la vivienda. A mejor calificación, menos gasto en las facturas de gas y electricidad.

10. Matices a tener en cuenta...

  • Coloca los radiadores bajo las ventanas para garantizar una buena difusión del calor.
  • No cubras los radiadores ni coloques cerca de ellos muebles u otros objetos que obstaculicen la transmisión del calor.
  • Abrir las ventanas 10 minutos es suficiente para ventilar la estancia.
  • Por la noche cerrar persianas y cortinas para evitar las filtraciones de aire.